Observatorio Microbiológico de Cuevas

Evaluación y control de comunidades fúngicas en cuevas sometidas al impacto de actividades turísticas

En la última década se está asistiendo a una progresiva colonización de las cuevas visitables y con pinturas rupestres por hongos. Así, la cueva de Lascaux, en Montignac, Francia, sufrió el año 2001 una invasión de Fusarium solani, de la que aún no se ha recuperado. Este mismo hongo, junto a Mucor circinelloides, invadió la cueva de Castañar de Ibor, Cáceres, el 24 de Agosto de 2008. Fusarium solani ha sido encontrado también en el aire, suelo y paredes de la cueva de Doña Trinidad, Ardales, Málaga. En un reciente trabajo, miembros del equipo que presenta este proyecto, describieron la asociación entre hongos e insectos en cuevas y, posteriormente, se ha demostrado la relación entre los hongos presentes en la cueva de Lascaux con los insectos.

En este proyecto se propone la creación de un Observatorio Microbiológico de Cuevas, donde a través de un estudio de las aerobiología de algunas cuevas andaluzas, se pueda controlar los hongos presentes en el ecosistema, y poder detectar a tiempo aquellos brotes que pudieran comprometer la integridad de la cueva y sus pinturas rupestres, en el caso de que las tuviera. A tal fin se propone un estudio en profundidad sobre las comunidades fúngicas de la Gruta de las Maravillas (Aracena, Huelva), con 160.000 visitas/año, Cueva del Tesoro (Rincón de la Victoria, Málaga) con 26.000 visitas/año, y cueva de Doña Trinidad (Ardales, Málaga) con 1.000 visitas/año, de los reservorios de hongos en tales cuevas y de las posibles colonizaciones o brotes fúngicos que puedan tener lugar en el futuro. Las cuevas seleccionadas son representativas de cavidades de interés geológico (Gruta de las Maravillas) y de interés cultural (Cueva del Tesoro y de Doña Trinidad, con pinturas rupestres) y presentan un rango suficientemente extenso de visitantes/año como para poder evaluar el impacto de las visitas turísticas sobre las cuevas.